EL PRÍNCIPE FELIZ
Inspirado en el amor por sus dos hijos, el célebre poeta, escritor y dramaturgo británico-irlandés Oscar Wilde empezó a escribir cuentos para niños y publicó en 1888 uno de los más bellos e inolvidables cuentos infantiles.
El príncipe feliz narra la tierna historia de amor entre una estatua y una golondrina, dos seres compasivos ante las atrocidades de la humanidad y que a través de la solidaridad y la entrega descubren que gracias al afecto que los une son capaces de superarlo todo, incluso la muerte.
Artísticamente bello y puro, el cuento llega, con toda su ternura humana, igual a un niño que a un adulto.